Santiago. Más de diez comunidades de la zona sur de esta provincia realizaron ayer un paro pacífico para exigir el arreglo de la carretera Matatanzas-Palo Amarillo que conecta con esta ciudad.
Cuatro de los organizadores de la protesta se encadenaron a un vehículo, en medio de la citada vía, mientras que otros aprovecharon para jugar dominó y vitilla con el objetivo de llamar la atención de las autoridades.
Las actividades comerciales, educativas y el transporte público de pasajeros fueron paralizadas por más de 10 horas en la zona, cuyos moradores dicen que se sienten engañados por funcionarios del gobierno.
Las comunidades afectadas por el paro figuran Guayabal, La Jagua, Puñal, Laguna Prieta, Palo Amarillo, Matanzas, Los Picos, Baitoa, La Zanja, y otras localidades.
En tanto el secretario general de la ruta L y vocero de las organizaciones comunitarias, Teobaldo Almonte, quien también se encadenó dijo que dieron un plazo hasta hoy a las nueve de la mañana para que inicien los trabajos.
"Si en un plazo de 24 horas no se inicia la reparación de la carretera haremos otra huelga pero por tiempo indefinido", advirtió el dirigente comunitario.
Miewntra que a la zona de la protesta llegó un contingente policial comandado por el coronel Rosario, quien exhortó a los manifestantes a mantener la calma y evitar desórdenes.
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