La Reyna,
Las comunidades de Canca La Reyna y Borojol quedaron incomunicadas debido a los derrumbes provocados por las intensas lluvias en la carretera que conecta ambas localidades.
Los deslizamientos, además, dejaron al borde de un precipicio unas 15 casas, las cuales podrían colapsar en cualquier momento.
La señora Antonia Núñez, una de las afectadas, dijo que hasta el momento ninguna autoridad gubernamental se ha presentado al lugar para ayudar a los vecinos, cuyas viviendas fueron afectadas.
"Ya estamos en peligro, todavía estoy viviendo aquí, pero con miedo porque la carretera que pasa frente a mi casa está hueca", expresó la señora.
Los comunitarios solicitaron al Ministerio de Obras Públicas la instalación de gaviones y muros de contención para poder frenar los derrumbes y de esa forma proteger la vida de los lugareños.
El presidente de la junta de vecinos de Borojol, Gustavo Romero, solicitó al gobierno reubicar los afectados en un lugar seguro donde sus vidas esté garantizada.
"Estamos desesperados porque nadie viene a socorrernos, y nosotros somos gente pobre", manifestó Romero.
De su lado, el ingeniero civil y urbanista Carlos Ventura Mejía, manifestó que los deslizamientos se deben a una falla geológica existente en la zona norte de la comunidad de Borojol.
Los derrumbes también están afectando varios tramos de la carretera Licey y los caminos vecinales aledaños, dificultando el tránsito de vehículos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario